Viajar de día en temporada de lluvia puede ser más seguro y práctico por varias razones
Es importante tomar en consideración las condiciones climáticas, cuando vas a realizar algún viaje en temporada de lluvia, recuerda mantenerte informado con los informes meteorológicos proporcionados por el SENAMHI, para evitar riesgos innecesarios, recuerda que cuando llueve puede haber deslizamientos, crecida de ríos, huaicos, caída de piedras y se recomienda viajar en horas del día para prevenir accidentes y hechos fortuitos el Consejo Regional de Educación y Seguridad Vial de Apurímac, (CORESEVI) te brinda las siguientes recomendaciones: Viaja de día: Durante el día, la luz natural mejora la visibilidad en la carretera, lo que es especialmente importante cuando las condiciones meteorológicas empeoran debido a la lluvia. Las lluvias pueden dificultar la visión y aumentar el riesgo de accidentes, pero la luz del sol o incluso la luz diurna es esencial para detectar peligros como baches, charcos profundos o vehículos detenidos. Menor fatiga: Viajar de noche puede ser más cansado, ya que el conductor tiene que esforzarse más para mantenerse alerta, especialmente si la lluvia afecta la visibilidad. Durante el día, las personas tienden a estar más descansadas y alertas, lo que mejora su capacidad para reaccionar a cualquier emergencia. Condiciones más predecibles: En las horas del día, es más fácil monitorear las condiciones climáticas a través de pronósticos y actualizaciones en tiempo real. Esto te permite planificar mejor el viaje y tomar decisiones más informadas si las lluvias son muy intensas o si las carreteras se vuelven peligrosas. Mayor asistencia en caso de emergencia: Si algo sale mal durante el viaje, ya sea un accidente o un problema mecánico, es más probable que otros conductores pasen por la carretera durante el día, lo que facilita la ayuda en situaciones de emergencia. Además, las estaciones de servicio o los puestos de socorro suelen estar más operativos durante las horas de luz. Menos riesgos con el tráfico: En muchas regiones, el tráfico es más ligero durante el día en comparación con la noche. Viajar durante el día puede evitar los riesgos adicionales que implica conducir de noche bajo la lluvia, cuando el tráfico suele ser más denso o cuando algunos conductores no están lo suficientemente atentos debido a la oscuridad. Mejor control del vehículo: Las carreteras mojadas durante la lluvia pueden ser resbaladizas, lo que hace más difícil controlar el vehículo. Durante el día, es más fácil detectar cambios en la superficie de la carretera y reaccionar rápidamente. Las luces de los vehículos también son más visibles y permiten una mejor detección de los movimientos de otros autos en la vía Condiciones de la carretera más estables: Durante el día, es más probable que el sol o el calor parcial ayuden a secar las carreteras, lo que puede evitar la acumulación de agua que cause inundaciones o charcos peligrosos. En la noche, estas condiciones pueden persistir sin cambios, aumentando el riesgo de conducción peligrosa. Respeta las señales y límites de velocidad: contribuyen a tener un mejor panorama de la vía. Viajar de día no elimina completamente los riesgos de conducir bajo la lluvia, pero ofrece condiciones que pueden hacer que el viaje sea más seguro y controlable.
