Vanidades de los ricos
Escribe: PC Luís Quintanilla López (+)
Así es amigos. Al decir rico, no estoy refiriendome a los “ricos” vocablo que usan las contrapartes hacia los que somos guapos, hacia los que tenemos más piedra que los complejos arqueológicos de Machupiccchu, Sacsayhuamán y Choquequirao; tampoco me es¬toy refiriendo a las “ricas”, como Gisela Valcárcel, Susan León, Amparo Brambila, etc., En esta oportunidad, cuando digo ricos me estoy refiriendo a los hijos predilectos de h Diosa Fortuna, de los que tienen billetes hasta por gusto, de los que saben gastar su plata pagándose de sus antojos, de los que saben compartir su riqueza con los desposeídos, de los que saben agradecer a la tierra que les dio oportuni¬dad de cambiar, no voy a referirme a los ricachones que guardan su dinero bajo la almohada y dentro del colchón, que no saben gastar su plata, que no compran plátano por no botar la cascara, que se creen inmortales y que van a sobre-vivir a sus nietos, cuando en realidad no calculan ni carburan que el suplente interpelara a la viuda, diciendo: ¿Tan poquito ha dejado tu marido? Una nota periodística, fresquita nomas, decía que un ricachón limeño ofrecía una recompensa de mil nuevos soles, a quien de razón del paradero de un perrito faldero Chihuahua, casi - casi igual a la noticia que reproducí el año pasado con ocasión del aniversario de Arequipa, en que un characato había comprado un toro de pelea en la fabulosa suma de 30 mil soles, hecho que nos hace suponer que el sambito camanejo debe ser medio aficionado a tener relaciones con la “blanquita”, solo así podría darse tremenda botadera de plata en momentos difíciles. Singularizando un poco, hablando de nuestro abancaycito, tratándose de recompensas para quien sepa el paradero de un perrito faldero, a las justas nos valdríamos del aviso de servicio público del DIARIO CHASKI que cuesta la astronómica suma de cinco soles. Ahora veamos, en el supuesto -que Dios no lo permita, Jesús, María y José en el supuesto que secuestren a la suegra, en este caso, soy bastante sincero en decir, que la parte interesada o sea el yerno, a lo más podría ofrecer una recompensa de cien soles a quien de informes del paradero de la suegra secuestrada, en otros casos hasta optaría decidir sin consultar con la contraparte para que la suegra siga permaneciendo en poder de los secuestradores por los siglos de los siglos. Estas cositas hacen concluir que para darnos esos lujos que se gastan solamente los ricos - ricos, entiéndase bien, aquí en abancaycito pasaran 50 años, es decir hablando en lenguaje cristiano cuando hayan pasado 10 gobiernos democráticamente elegidos por el periodo de 5 años cada uno, mientras tanto seguiremos recurriendo a los avisos de servicio público de CHASKI para recuperar un perrito o algún familiar secuestrado o extraviado. De esto tengo plena seguridad, sino que me corten la mano, porque no voy a corriente de Abancay, seguiré a pie firme con CHASKI, sin buscar candidaturas al Congreso, ni siquiera a alcaldías ni regidurías, más claramente hablando, sin buscar ventaja personal. Para terminar, tengo que aclarar públicamente, que el párrafo referido a las suegras es simplemente una broma, una broma que me permito hacer con el respeto que ellas se merecen, porque, a decir verdad: ¿Quién no tiene miedo a la suegra?, sino que levante la mano y llame por teléfono para conocerlo.
