La conducta cruel de algunos choferes de combis
Dr. Oscar Loayza Azurín
El servicio de transporte público en Abancay sigue de mal en peor. A la sociedad, unidades destartalada y excesivamente pequeñas se suma el comportamiento vejatorio de choferes y cobradores en perjuicio de los sufridos usuarios en las narices de policías de tránsito e inspectores municipales que lamentablemente no cumplen con su trabajo de manera eficiente. Ahí están de adorno, dando la apariencia de que están “controlando”, poniendo orden. ¿Controlando qué? Eso es lo que ha ocurrido a las 7.10 de la mañana del miércoles 31 de mayo en la calle Bella Abanquina de Villa Gloria cuando a escasa distancia de la Unidad de Servicios Especiales de la Policía Nacional del Perú, USE PNP, el chofer de la combi con placa de rodaje N° C3K-965 se negó a recoger a escolares que le hicieron el alto para ir a sus colegios, ignorándolos por completo, como si no existieran. Al ser reprochada su conducta contestó, desafiante, que él era el conductor y que sabía lo que hacía. Precisamente para erradicar este tipo de actitudes de los que prestan este importante servicio público, el Colectivo El Mariño, en sendas reuniones tanto con el General jefe del Frente Policial Apurímac como con el Gerente de Transportes del Municipio de Abancay, hace poco, se les había propuesto llevar a cabo talleres de capacitación no solo en temas vinculados a reglas de tránsito sino especialmente en relaciones inter personales, pero desgraciadamente todo quedó en simples ofrecimientos. ¿Hasta cuándo soportaremos estas afrentas?