Gran participación en el Festival Diospi Suyana “Vida en los andes
E“Vida en los Andes” transformó el distrito de Curahuasi en un verdadero epicentro de fe. Del 26 al 30 de abril, más de 4,500 jóvenes peruanos y extranjeros participaron en este evento cristiano, organizado por la misión Diospi Suyana cuyo nombre en quechua significa “Confiamos en Dios”. Durante cinco días, la presencia de Dios fue palpable. Participantes provenientes de los 24 departamentos del Perú y 22 países vivieron una experiencia que trascendió lo cultural y turístico: un encuentro profundo con Jesucristo. Através de plenarias, talleres, competencias deportivas, películas, 10 conciertos con artistas internacionales, tiempos de oración, consejería y adoración, se proclamó con firmeza el evangelio de Jesús. El mensaje central del festival fue claro: Dios ama a cada persona y ofrece una vida nueva en Cristo. Cada espacio del evento fue una plataforma para impartir principios y valores basados en la Palabra de Dios. Uno de los momentos más impactantes fue la campaña evangelística realizada en la Plaza de Armas de Curahuasi, donde más de 1,500 personas escucharon el mensaje de salvación a través del evangelista estadounidense Andrés Palau. El testimonio del cantante urbano Redimi2, quien compartió su testimonio de conversión por el poder de Cristo, tocó a miles, confirmando que Dios sigue obrando con poder en esta generación. Con más de 6.6 millones de seguidores en YouTube, su participación fue clave para llevar el mensaje de vida a nuevas audiencias. El festival no solo dejó un impacto espiritual, sino también activó la economía local. Hoteles, restaurantes y negocios se llenaron de visitantes. Además, 960 personas a través de una caminata llegaron al atractivo turístico Capián Rumi, donde se realizó un servicio de Acción de Gracias, orando por el Perú y declarando bendiciones sobre nuestra nación. Con el apoyo de la Municipalidad Distrital de Curahuasi y la cobertura de 18 medios de comunicación, este evento marcó un antes y un después. Curahuasi se proyecta ahora como un lugar de fe, cultura y esperanza para todo el país.
