Clasificación de tragos
Así es amigos. Como cuestión previa aclaro que no es por afición ó devoción a los tragos, nada de eso, desde luego sin pecar de santo, de vez en cuando en ocasiones especiales tomo mis agüitas como cualquier vecino de la ciudad. El presente comentario me ha sugerido un hincha de esta página que había sabido de tragos cortos, desde los chilcanos pisco, guinda, piscosawers y cocteles de mil colores y sabores. La preparación había sido simple y ha gustado más, no por el olor ni por el sabor del trago raro, sino, porque se trata de algo especial que lo habían llamado: “TRAGO PARA PUDIENTES Y NO PU-DIENTES”. De primera intención al escuchar este sugestivo título para pudientes y no pudientes, de seguro se imaginarán que se trata de tragos para gente adinerada y para no adinerada. Nada de eso mis amigos. Este humilde pecho también se «quinceó» en la primera El famoso bocadillo líquido se había referido a lo siguiente: Suspenso...no hagan ruido... guardar un minuto de silencio... pues romper un plato ó una taza en cualquiera de las mesas comedor de los hogares abanquinos, puede ser fatal para el artista de la sin hueso que escribe este comentario. El trago para PUDIENTES se había preparado de la siguiente manera: Ingredientes: - Una taza de té, media tajada de limón y un copón de cañazo. El trago para los NO PU¬DIENTES se había preparado de la siguiente manera bastante sencilla, oreja, pestaña y ceja ingredientes: - Un galón de aguardiente de caña, pero que sea cabeza pura de San Gabriel. - Dos litros de miel de abeja pura bien diluida al sol. - Una rajita del tallo del chuchuhuasi, y 5 hojitas de flor de huanarpo blanco que había sido exclusi¬vo para los varones. - PREPARACION: Vaciar - todo un balde grande nuevo y limpio de plástico, mover y remover bien con lo que se encuentre a la mano, puede ser una espátula de madera ó un molenillo para batir el chocolate, luego servir en copas de vino tipo «huaraccaso». El contenido alcanza para más de 100 personas. - Bien mis amigos, aquí viene una interrogante de parte de ustedes: - ¿Y qué del otro mundo tienen estos tragos especiales para pudien¬tes y no pudientes? - La respuesta es tajante y sencilla. Resulta que el trago en referencia servido con los 4 ingredientes había sido para los caballeros jubilados en el amor, para que puedan entrar en la «onda de la onda» a la hora de ingresar a la lid en el ring de las 4 perillas. En cambio, sirviendo cabeza pura de caña de San Gabriel con una taza de té había sido para los pu¬dientes, es decir, para los que no necesitan todavía estimulantes, para los que se bastan solos. - ¿Simpáticos tragos verdad? Y será pues hasta la próxima receta, mientras tanto, cada cual puede preparar el trago que le corresponde.
